Era la oscuridad lo que más miedo me daba, me ponía los pelos de punta, realmente no me dejaba tranquila. Es normal que donde más silencio haya es donde en realidad más ruidos escuche . Mi cabeza es un constante motor que jamás deja de funcionar, recarga las baterias pero no para, y no se calla.
Pocas veces llegué a mi casa y no me sentí vacia, o rara .Pocas veces pude acostarme como hoy, tranquila, segura . Hoy anduve por la calle sintiendome orgullosa de lo que llegué a ser, siendo yo, siguiendo mis instintos y deseos, viviendo la vida a mi estilo. Cierro los ojos y confío. Aunque no niego el miedo que le tengo a seguir viviendo, a cada cambio, cada meta. El miedo que me dan los cambios, como me atemoriza pensar que algún día todo esto que me hace bien, capáz ya no este. Soy debil y siempre lo fui. Soy insegura, pero hoy estoy segura.
Mañana no creo que se vaya mi miedo a la oscuridad.
Hoy al menos si. Hoy soy lo que siempre quise ser.
0 comentarios on " "
Publicar un comentario