Entré a mi casa y no tuve miedo.Me dí cuenta que más bajo que esto no se puede, que más miedo que a la misma soledad, que al fracaso y al hecho de perder tus sueños, no se puede tener.
Enotonces me dí cuenta. Mis miedos eran para suplantar otros miedos. Mis miedos eran para creerme que no lo sabía. Mis propios miedos eran para NO ESCUCHARME. Exacto. No escucharme.Siempre lo supe, pero jamás caí en la cuenta de que todo eso se fuera a cumplir. Tan poco y tan chiquito, como mis sueños. Tan chiquito como veo todo, tan innecesario que es lo que tengo al rededor. Y tan feo que es sentirse tan diminuto en medio de cosas tan grandes, tan escalofriantes.. tan tuyas.13.2.11
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