Sólo dime lo que quiero escuchar ...

Abro los ojos, pero no veo nada, me encuentro rodeada por una gran oscuridad dentro de una nube que recubre la felicidad y los destellos de amor, en un lugar dónde sólo se siente lo que no hay.
Respiro.Vuelvo a cerrar los ojos implorando a todo el universo que cuando vuelva a abrirlos, voy a sentir esta vez lo que estoy buscando, voy a cambiar la realidad.
Hago el intento, pero todo parece ser imposible, todo lo que allá afuera pueda encontrarme parece muy lejos, muy dificil , entonces me resigno a seguir con los ojos cerrados , que por lo menos estoy mejor sin enfrentarme con nada ni nadie.
La noche es el peor enemigo de nuestra cabeza, la noche, la oscuridad, todo hace que realmente a veces sea mejor no hacer, fingir, no pensar, no buscar y no crecer. Aquellos miedos que dejan de ser miedos y se convierten en realidades concretas, en las que sólo se refleja la nada, y a veces lo más secreto y profundo.
No era idea mia seguir temiendo al hecho de soñar y luchar, y mucho menos al dejar que se roben todo de mi, haciendo desaparecer el último rastro de aire que me quedaba , sin poder decir ni adiós pero con una pregunta que retumba desde lo más profundo del alma en todas las esquinas de la ciudad ....

¿Por qué se fue?