Me cuesta creer como a veces tenemos todo lo que queremos y sin embargo seguimos preocupandonos por cosas insignificantes. Es dificil asumir la responsabilidad de que nuestros actos son los que hacen que estemos donde hoy estamos. A veces realmente nos paramos justo en el lugar que queriamos, pero la luz no nos deja ver la realidad, o simplemente seguimos buscando que otras cosas sucedan en vez de disfrutar de todo lo mágico que tenemos. Todo se convierte en un continuo problema, ¿para qué? exacto, para nada.
Tengo mil razones para sonreir. O quizas es una, una la más importante, y la cual me da mil sonrisas, y muchas más. Tal vez verte feliz es lo que me hace feliz. Saber que estas bien, me hace bien a mi. Soy fuerte porque vos estas conmigo, porque vos me impulsas. Y me doy cuenta que tengo todo lo que quiero. Que no tengo porque seguir buscando, si no simplemente continuar disfrutando y trabajando en que toda aquella felicidad perdure en el tiempo, en los años ...
Segura de estar donde quiero, segura de tomar las decisiones correctas. Segura del dolor que causa ver la verdad, pero convencida de que esa verdad cada vez me va a hacer más fuerte. Orgullosa de saber que todo lo que tiene que estar cerca mio, lo va a estar ... y lo que no, se va a ir y va a quedar lejos ... muy lejos.
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